Un poema con elevadas dimensiones.

Miranda Voces de pueblo se escuchan y hasta se leen en la atmosfera de la isla declaraciones de amor corren con el viento dejando entrever su pasion cimera. Un eco insistente se registra en el ambiente una y mil veces se escucha un te quiero un contagioso olor que no es a feromona penetra mis sentidos de varon viril. Recibo con estoisismo cierta propueta defender tu integridad a cualquier costo no permitir que se viole tu cuerpo y asi evitar que algun intruso alcance el climax. No dudaria en dar mi vida por ti sin ser tu dueno, aun sin conocerte no me daria verguenza refugiarme en tus faldas y permitir que mis lagrimas rociasen tus cimientes. Aunque no he logrado de ti una caricia siquiera un abrazo que me aislara del frio por contagio te amo sin miedo al rechaso sin que el amor de otros me provoque celos. Tu cuerpo da mas de lo se te pide alimentas a tus hijos y hasta a los agenos eres madre abnegada que nunca se queja tus senos lactan a infantes como a mayores. Siendo mujer podrias llamarte Patria quizas Juana... como mi madre pero aunque en realidad no eres de carne eres sentimiento y amor... eres naturaleza. Miranda... no eres mujer no puedo alagarte con fraces hermosas y mentiras coloquiales para conquistarte y con enganos fastuosos llevarte a la cama. Miranda... eres loma, eres montana eres foresta que nutre la vida eres rios, riachuelos, cascadas eres filtro del respiro y el frescor. Cuando supe de ti me enamore jure defenderte por mi propio bien entendiendo que de tu vida dependia la mia que al pasar los anos mis hijos lo agradecerian. No importa que digan los mercaderes que tus entranas guardan riquezas doradas prefiero verte erguida y con tu verdor que verte sufrir en pos del "progreso". Miranda... yo se de tu capacidad se que eres capaz del sacrificio pero yo te puedo asegurar que el mismo no valdria la pena. Se marcharian los intrusos despues de aniquilarte te dejarian sin corazon y hasta sin alma succionarian la sangre de tus venas sin dejar una pinta en tus reservas. Dejarian tu pueblo huerfano de ti y sin tu presencia estaria en agonia su camino seria corto antes de fallecer porque tu eres el pulmon de su geografia. Por eso... no ha de suceder lo que pretenden enfrentaremos con flores a los intrusos y si no se acogieren a nuestras razones entonces... sera el cielo quien cobre tal fechoria. Por: Andres A. Castro.