El gasto en alimentación absorbe el 47.2% del presupuesto de las familias más pobres,mientras los hogares de mayores ingresos destinan a esos fines solo el 12% del costo de sus consumos básicos.
En la estructura de costos de la canasta familiar básica, el grupo alimentos es el principal componente para los cuatro primeros grupos familiares, conocidos como quintiles.
En el quinto quintil, que ubica a las familias de mayor poder adquisitivo, el mayor factor de costo es el Transporte y el segundo Vivienda, siendo Alimentos y Bebidas el tercero. Entre el costo de la canasta básica de las familias más pobres o del primer quintil y las más ricas o quinto quintil, hay una diferencia de casi cinco veces.
Mientras el transporte representa una cuarta parte del gasto de los hogares más pudientes, con una ponderación de 24.80%, para los más pobres es apenas el 9.49%.
El Grupo Transporte está compuesto por una serie de gastos vinculados, que incluyen costos de vehículos, combustibles, neumáticos, lubricantes, piezas y repuestos, seguros, conservación y reparación. En la estructura de costos de la canasta familiar básica para el primer quintil, excepto el Grupo Alimentos y Bebidas, no hay ningún componente que represente por encima del 10% del valor total.
Referencia
Al mes de enero pasado, fecha que tiene el último cálculo del costo de la canasta familiar, el valor asignado para los hogares de menores ingresos era de RD$12,583.78, mientras que para las familias de altos ingresos era de RD$56,437.74.La diferencia de valor monetario que separa las canastas extremas es de RD$43,853.96.
El costo de la canasta nacional, que es la media de todos los quintiles es de RD$27,593.94.
Según refleja la última estructura de costo de la canasta calculada por el Banco Central, entre los quintiles más cercanos hay una diferencia de costos de entre cuatro mil y seis mil pesos y en términos relativos entre 22 y 96 por ciento.
En los quintiles donde son mayores los niveles de diferencias, son entre el primero y el segundo y entre el cuarto y el quinto. Entre la canasta de los más pobres y la de los segundos menos pobres hay una diferencia, calculada en base a los precios de enero del 2015, de RD$5,403.22, equivalente a un 42.93 por ciento, mientras que entre las familias del cuarto y quinto quintil la diferencia del costo de la canasta es de RD$27,666.44, equivalente a un 96.19 por ciento.
El gasto familiar de los hogares del quinto quintil está más diversificado y tres renglones representan la mitad del valor global. Después del Grupo Transporte con su 24.80 por ciento de ponderación, los otros dos grupos que absorben mayores recursos del presupuesto de las familias de mayor poder de compra son Vivienda, con un 13.47 por ciento, y Alimentos y Bebidas no Alcohólicas, con 12.36%.
El gasto del Grupo Vivienda es el segundo mayor para los tres quintiles de ingresos más bajos y el segundo para el cuarto quintil, marcando una tendencia de que a mayor poder económico de los hogares, más elevado es el gasto en vivienda, que abarca alquileres, pago de servicios de electricidad, agua, recogida de basura, pintura , reparaciones, gas y combustibles.
Proporcionalmente los pobres gastan más que los ricos en bebidas alcohólicas y tabaco. Las familias del primer quintil dedican a ese renglón el 2.36% de su presupuesto, mientras que las del quinto quintil destinan el 1.90 por ciento.
En cambio el gasto en educación es proporcional, al nivel de ingresos de las familias. En la medida que los hogares están en un nivel superior de ingresos, más ponderación tiene el gasto educativo en su canasta básica de bienes y servicios.
Los del primer quintil destinan el 1.25% de su gasto total a educación, los del segundo el 1.86%, los del tercer el 2.82%, los del cuarto el 3.374% y los del quinto el 5.41%. La media nacional del gasto en educación de los hogares es de 3.74% del valor de la canasta básica.
Mientras que en recreación y cultura el gasto promedio nacional representa el 4.12 del presupuesto de los hogares, con un comportamiento similar en los tres primeros tramos de ingresos (3%) y de 4.24% y 5.02% para el cuarto y quinto quintiles.
En salud, el gasto de los hogares dominicanos no reporta muchas diferencias entre grupos o quintiles. La media es de 5.21% del gasto total. Para los hogares más pobres representa el 4.33% y para los más ricos el 5.42%, por debajo incluso que los del cuarto quintil, que tienen un 5.59%. Un patrón similar se da en el caso del gasto en vestido y calzado, donde la media es de 4.56%, y el quinto quintil destina el 4.32%, el segundo más bajo. El primero es del primer quintil, que es de 4.05% del gasto familiar.
Gasto general en comida bajó 5.6 puntos en 10 años
En un documento en el que dió a conocer el cambio de año base para el cálculo del Índice de Precios al Consumidor (IPC), el Banco Central explica que la comparación de los cambios de la estructura de consumo de las referidas encuestas, evidencia que los hogares dominicanos durante los últimos 10 años redujeron en 5.69 puntos porcentuales la proporción de sus ingresos destinados a la compra de alimentos y bebidas no alcohólicas, al reducirse de 30.79% que representaba en 1999 a 25.10% en el año 2010.
Ese resultado refleja una mejoría en las condiciones de vida de los dominicanos, porque según la Ley de Engels a medida que mejoran los ingresos de las familias, la proporción de gastos en alimentos se reduce, porque aunque los alimentos representan bienes de demanda inelástica, las familias al mejorar sus condiciones de vida, disponen de mayores recursos para otros gastos como recreación y cultura, transporte, servicios relacionados con la vivienda, bienes y servicios diversos, entre otros.
Aumentaron su ponderación los Grupos Viviendas (de 9.27% a 11.60%) y Transporte, que pasó de representar un 16.01% a 17.95%.Con el cambio del año base se amplió de ocho a diez el número de grupos de bienes y servicios utilizados en el cálculo del IPC, por el Banco Central.
Por Héctor Linares
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